Periodista, unite!
El blog es hoy una herramienta fundamental para todo aquel que desee hacer periodismo de manera sencilla, económica y con una amplia gama de herramientas útiles que permiten, entre otras cosas, una comunicación fluída con los seguidores.
El surgimiento de la web 2.0 se caracterizó por un sinfín de nuevas posibilidades de participación social en la red. En este contexto interactivo, las nuevas herramientas fueron la clave para el éxito de los blogs, simples pero efectivas páginas que permitían expresarse en la web a cualquiera que así lo desee. Los blogs han ido popularizándose durante la última década, aunque su gran salto se dio hace unos 5 años, cuando comenzó la masificación del fenómeno y los medios comenzaron a hacerse eco de esta nueva tendencia mundial.
Pero si esto es así y cualquier persona puede tener un blog, ¿que lo diferencia al armado por un periodista?. Principalmente y más allá de las herramientas, el periodista deja su impronta en el trabajo, lo cual de por sí constituye una diferencia con otros blogs del estilo. Con respecto al blog en sí, es totalmente funcional a la función periodística: permite agregar material audiovisual e incluir distintos widgets (aplicaciones pequeñas) que ayudan a hacer más rico al blog y menos tediosa la lectura. La incorporación del libro de visitas (tambien referenciado como guestbook o simplemente comentarios) permite tambien un intercambio entre el periodista y el lector en tiempo real, a diferencia de otros medios. Justamente esta instantaneidad es otro de los principales beneficios que ofrece la web 2.0 en general y el blog en particular.
Sin embargo, como sucede siempre en internet, todo lo ofrecido es susceptible de ponerse a prueba, y muchas veces, quedarse ahí. El periodista debe conservar sus premisas básicas a la hora de escribir en un blog, y no desobedecerlas por ser un espacio gratuito o libre. Esto quiere decir que se debe chequear la información, no infringir leyes de copyright y escribir correctamente.
Por todo lo expuesto es que hoy los blogs son tierra fértil para el campo periodístico, a la vez que otros individuos sin aspiraciones de dedicarse a la prensa abren el debate de si cualquier persona que escribe y transmite información en un blog merece ser llamado periodista.